Este 25 de noviembre se conmemora una vez más el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, una fecha propicia para revisar lo que el Estado en su conjunto está haciendo para garantizarles a las mujeres el derecho a vivir una vida libre de violencias como es su deber, tal y como está consignado en los diversos instrumentos internacionales ratificados por Colombia con la coadyuvancia de la sociedad en general, especialmente las organizaciones de mujeres o que misionalmente aborden el tema.
Cabe recordar que el año pasado con el inicio de la pandemia del Covid 19 y las subsecuentes medidas adoptadas por las autoridades, se dieron todas las condiciones para la tormenta perfecta, es decir, para el incremento de la violencia contra las mujeres: el confinamiento de ellas con sus potenciales y reales agresores, por un lado, y la disminución de la atención institucional para atender a las víctimas, debido al cambio en la modalidad de atención (virtual), por el otro. Así las cosas, el año pasado hubo una disminución del orden del 39% de las mujeres víctimas de violencia basada en género (VBG) en el departamento de Nariño con relación al año 2019.
De igual manera, según información reportada por las Comisarías de Familia de Pasto[1], durante el año 2020 hubo una reducción del 65% en el número de medias de protección por violencia intrafamiliar dispuestas por esas instituciones con relación al año anterior. Dichas cifras en ningún caso significan una disminución en la magnitud del fenómeno, sino más bien una disminución en el número de registros o denuncias de los casos por las barreras en la atención de las instituciones competentes que las mujeres víctimas tuvieron que afrontar.
Lo anterior es tan cierto que, de acuerdo con cifras preliminares recopiladas por Fundepaz del Sistema Nacional de Vigilancia en Salud Pública – SIVIGILA[2] sobre violencias de género no fatales en Nariño, para lo que va del año 2021 se han presentado unos 2.060 casos de violencia contra las mujeres, es decir, un 51% más que el año pasado en el mismo rango temporal, aclarando que son los casos denunciados, ya que muchas víctimas no acceden a los servicios institucionales por desconocimiento y desconfianza en los procesos.
La cifra de 2.060 casos de VBG significa que durante lo que va de este año diariamente en el departamento al menos unas 8 mujeres han sido víctima del algún tipo de violencia en su contra, siendo las violencias no sexuales (física, psicológica, negligencia y abandono) con el 74% (1.518 casos) la tipología de mayor incidencia sobre ellas, seguida de las violencias sexuales con el 26% (542 casos) del total de registros. La violencia física, es decir, aquella ejercida a través puños, patadas, empujones, con objetos, etc., representó más de la mitad (55%) del total de la violencia contra las mujeres en el período en referencia.
Al analizar las cifras de violencia contra las mujeres por municipio en el departamento de Nariño durante lo corrido del año 2021, como viene ocurriendo en años anteriores, Pasto es la región con mayor incidencia del fenómeno ya que ahí se presentaron casi la tercera parte del total de casos (29%), seguido de Tumaco con el 13% e Ipiales con el 10% de casos del total.
Tabla 1
Casos de Violencia contra las mujeres
Nariño 2021p.
| Municipio | No sexual | Sexual | Total | Participación |
| Pasto | 384 | 206 | 590 | 29% |
| Tumaco | 186 | 77 | 263 | 13% |
| Ipiales | 154 | 59 | 213 | 10% |
| Túquerres | 81 | 16 | 97 | 5% |
| Guachucal | 60 | 2 | 62 | 3% |
| Buesaco | 35 | 11 | 46 | 2% |
| La Unión | 28 | 10 | 38 | 2% |
| Ricaurte | 29 | 9 | 38 | 2% |
| Pupiales | 29 | 6 | 35 | 2% |
| Sandoná | 31 | 4 | 35 | 2% |
| Resto | 501 | 142 | 643 | 31% |
| Total | 1.518 | 542 | 2.060 | 100% |
Fuente: IDSN / Procesado Fundepaz
Las cifras en aumento de la violencia contra las mujeres en Nariño, especialmente en el municipio de Pasto, demuestran que la respuesta del Estado sigue siendo improvisada, errática y poco eficaz y a veces se limita a soluciones retóricas en documentos oficiales sin que haya un real interés y compromiso por abordar el fenómeno de fondo. Si bien existe una ruta de atención a las víctimas de VBG, es un instrumento que presenta varias barreras para que se efectivo, entre otras tales como: i) El desconocimiento de la normatividad por parte de los funcionarios; ii) El bajo nivel de sensibilización de los funcionarios con respecto a la magnitud del fenómeno; iii) Falta de difusión y pedagogía de la ruta de atención.
Quizá la máxima expresión de violencia hacia las mujeres es su asesinato tan sólo por el hecho de serlo, en lo que se conoce como feminicidios. De acuerdo con la información recolectada por el Observatorio de Derechos Humanos de Fundepaz, sólo en el primer trimestre del año 2021 se habían dado 10 casos de feminicidio y 2 por tentativa de feminicidio. Sin embargo, el sistema de información SPOA de la Fiscalía General de la Nación Secciona Nariño solo arroja un caso de feminicidio para el año 2021[3], lo cual no deja de llamar la atención.
La Tercera medición del estudio sobre tolerancia social e institucional de las Violencias contra las Mujeres (VCM) muestra que, en cuanto a la tolerancia institucional, se evidencian avances importantes en los resultados del macrosistema (valores, creencias y representaciones culturales) y microsistema (relaciones personales más inmediatas) pero retrocesos en los del exosistema (factores estructurales que afectan los entornos más cotidianos de las personas). El informe concluye que resulta alarmante que más de la mitad (59,4%) de los funcionarios públicos que laboran en sectores que velan por los derechos de las mujeres reproduzcan imaginarios como “la ropa sucia se lava en casa”, es decir que la VCM sea un asunto netamente privado[4].
En relación a la tolerancia social, el informe afirma que es evidentes algunos cambios positivos con respecto a los niveles de tolerancia social a las distintas formas de violencia sobre las mujeres lo que evidencia un cambio cultural que busca sancionarlas, constituyendo Pasto, Bogotá D.C. y Popayán en su orden, las ciudades con menores porcentajes de tolerancia hacia la VCM[5].
De igual manera, mecanismos de articulación interinstitucional creados por la ley para abordar propositivamente el tema como por ejemplo el Comité Municipal de Seguimiento a la Implementación de la Ley 1257 cuya secretaría técnica la ejerce la Secretaría de las Mujeres, Orientaciones Sexuales e Identidades de Género (MOSIG) de Pasto, son desaprovechados por dicha dependencia, al no haber una planeación suficiente, con un estilo de liderazgo autocrático y en permanente pugna con las organizaciones de mujeres que hacen parte del él, sin la capacidad de tramitar asertivamente las críticas y el control que dichas organizaciones llevan a cabo en su seno.
A lo anterior hay que añadir que dicho espacio no cumple cabalmente con la función esencial de hacer seguimiento y evaluación de la implementación de la Ley 1257 ya que la mayoría de integrantes del Comité son instituciones públicas las cuales hacen las veces de juez y parte, evitando así un real seguimiento a la ruta.
Notas
[1] BASTIDAS, Sofía; QUINTERO, Isabel y PANTOJA, Bibiana. Derecho de petición- información fechado 23 de octubre de 2021 y decepcionado a través de correo electrónico el día 23 de octubre 2021 a las 12:30 pm [en línea]. Mensaje para: Nubia Sánchez. Pasto: Comisaría de Familia 1, 2 y 3, 25 de octubre 2021 [citado el 22 de noviembre 2021]. Disponible en: [email protected]
[2] MUÑOZ, Natalia. Re: Derecho de petición solicitando información de manera respetuosa [en línea]. Mensaje para: Jesús Arciniegas. Pasto: Instituto Departamental de Salud de Nariño, 9 de noviembre 2021 [citado el 22 de noviembre 2021]. Disponible en: [email protected]
[3] Grupo Peticiones, Quejas, Reclamos y Sugerencias. RV: Derecho de petición de solicitud respetuosa de información sobre vbg. Mensaje para: Nubia Sánchez. Pasto: Fiscalía General de la Nación, 25 de octubre 2021 [citado el 22 de noviembre 2021]. Disponible en: [email protected]
[4] Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer, ONU Mujeres Colombia. Tercera medición del estudio sobre tolerancia social e institucional de las Violencias contra las Mujeres (VCM) [en línea].
<https://www2.unwomen.org/-/media/field%20office%20colombia/documentos/publicaciones/2021/06/tercera%20encuesta%20tolerancia%20vcm.pdf?la=es&vs=1524> [Citado el 22 de Noviembre de 2021] p. 139, 141 y 17-19
[5] Ibid., p. 135, 139
